30 oct 2019

Oficial del ejército confederado (1863)


Lo primero que se reconoce en una figura modelada por Raúl García Latorre es su capacidad por captar las actitudes, gestos y expresiones de las personas en cualquier momento del día, como, por ejemplo, durante un descanso. Es el caso de esta bonita figura de 54mm perteneciente al catálogo de Art Girona y que retrata a un oficial confederado en un momento de distensión, disfrutando de su puro y de la conversación con los interlocutores que se quieran imaginar fuera de campo.

Hacía mucho tiempo que no publicaba algo. Pero esta figura se ha convertido en una excelente excusa para acabar con este silencio.

Una vez pulida, decidí pernar la pierna de apoyo, que ostenta una mayor verticalidad del eje que la izquierda. Buscaba la manera de presentar lo mejor posible al sujeto, que dibuja una diagonal que había que tener en cuenta en el momento de ubicarla sobre la base.




Para la imprimación, elegí un color gris oscuro inicial y luego realicé planteamientos de iluminación con otras grises.





















Para el rostro, elegí un tono más morenito, empleando para esta ocasión un Tierra Oscura  de Vallejo (70.874/134) que mezclaría con un poco de Rojo Cadmio Tostado (70814/034) para las sombras pero con un poco de Carne Base (70.815/17) y Carne Dorada (70.845/20) para las luces.


Con el rostro ya acabado, llegó el momento de dar una base de color al terreno (eso me permitiría controlar el color del gris y su constraste con la tierra. A partir de entonces empiezan los trabajos con los diferentes tonos de grises empleados.


Aunque antes, decidí trabajar las bases de las botas, los guantes, las partes del uniforme amarillas (con un marrón dorado -70.877/126) y el cabello del oficial.


Avances con los botones y los colores grises de la parte superior (Gris Cielo inicialmente 70.989/154) -y de las sombras (veladuras con Gris Marina Medio -70.870/158- y Gris Neutral -70.992/160).


Llegaba el momento de colgar la espada al cinturón. Recomiendo empezar por doblar el estaño sin pegar por la anilla de la funda del sable para poder calcular el trozo necesario y cortar posteriormente y pegar al cinturón con mayor libertad de movimiento. La mano con el puro ya estaba pegada y el suelo un poco texturizado con pincel seco.



Y luego de esto, ya viene el trabajo de pintura con todo lo demas y el empleo de pigmentos para el suelo y para ensuciar y "pegar" de esta manera a la figura en su espacio.


Y, de momento, eso es todo. ¡Hasta la próxima!

KPG