Mientras avanzo en el pintado de este perro de guerra, me ha parecido interesante mostrar cómo el empleo de barniz brillante en determinados puntos simulando sudor o humedad (en este caso en el hocico) y el pintado de un reflejo en la pupila de un ojo pueden contribuir a dar más vida a un animal. Claro que me he dado cuenta de que hay que ir con precaución y no excederse, o lo que quizás podemos conseguir es que no parezca real.
¡Saludos!
KPG